1. Cultiva tu independencia
Los gatos son animales independientes y no por eso son animales que no requieran afecto o que no quieran estar cerca de ti. La importancia de la independencia afectiva es una de las cosas mas importantes que debemos aprender de estos peludos animales para que nuestra felicidad no dependa de otras personas.
2. Haz ejercicio a diario
Aunque los gatos pasan la mayoría del tiempo durmiendo, los gatos siempre llevan su instinto cazador y hacen uso de este cuando se les da la oportunidad, además siempre hacen estiramientos específicos para que su cuerpo mantenga una elasticidad, alternar sesiones de descanso con sesiones de ejercicio es la fórmula perfecta.
3. Aprecia la rutina
Los gatos son animales de costumbres, normalmente los cambios en su entorno los desestabilizan y generan comportamientos extraños, de la misma manera mantener los hábitos de sueño, alimentación y otras rutinas como bañarte y asear tu cuarto son rutinas que podemos aprender de nuestros gatos para llevar una vida mas saludable.
4. Aprende a relajarte
La importancia del descanso, aprender a relajarse y disfrutar espacios que permitan que nuestra salud mental se mantenga a flote, son cosas que podemos aprender de nuestros gatos que nunca desperdician una hora de descanso.
5. Nunca dejes de jugar
Durante toda su vida los gatos conservan las ganas de jugar y sobretodo su curiosidad, es importante que nosotros como seres humanos siempre reservemos espacios para divertirnos, jugar y recordar las cosas que nos hacían felices de niños.
6. Si quieres algo, dilo
Expresa tus necesidades y exterioriza tus emociones, no te guardes nada. Cuando un gato quiere comida, la pide, cuando quiere dormir duerme, cuando está de mal genio lo expresa, en resumen: saca tu gato interior.
7. Libérate de lo que sobra
Gatos y humanos solo tenemos una forma de sentirnos más libres: dejar caer todos los pesos que llevamos encima. Si sientes un peso, sea pequeño o insoportable, identifícalo y déjalo caer.
8. Ignora a los que te molestan
Los gatos se alejan instintivamente de las personas u otros animales que se muestran alterados o son muy ruidosos. Sé como un gato y, si alguien te molesta o te provoca, no malgastes tu preciosa energía reaccionando. Practica la pose de la esfinge y céntrate en ti mismo y en tu respiración. Te ahorrarás un montón de estrés inútil.
9. Cultiva la paciencia
Los gatos pueden pasarse horas mirando por la ventana o montando guardia frente a un árbol con la esperanza de cazar a un pájaro u otra pequeña presa. Imítalos y proponte hacer cada mes algo que implique tiempo y esfuerzo. Por ejemplo, aprender a tocar un instrumento, coser o construir una maqueta.
10. Permite que te cepillen
Déjate querer, acepta el cariño de los demás.
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